Rehabilitación de La Tabacalera
La propuesta para la rehabilitación del edificio de Tabacalera en Madrid parte de un profundo respeto patrimonial, reconociendo el valor histórico e identitario del inmueble. La intervención equilibra la preservación de su esencia con la incorporación de nuevos elementos que aportan flexibilidad, funcionalidad y claridad organizativa.
Se propone una estrategia clara de rehabilitación que distingue lo nuevo de lo existente, estableciendo un diálogo entre el pasado y el presente. La intervención se plantea en fases, garantizando la continuidad del uso y permitiendo la adaptación progresiva del edificio a nuevas necesidades. La organización espacial se optimiza mediante circulaciones independientes y la segregación de usos, asegurando la seguridad y eficiencia operativa.
La arquitectura mantiene el carácter industrial del edificio a través de soluciones constructivas robustas, repetitivas y prefabricadas, que racionalizan la partición de los espacios destinados a estudios y residencias. La flexibilidad es clave en el diseño, permitiendo la adaptación de los espacios a diferentes actividades y usuarios. La intervención se apoya en la reutilización y mantenimiento de las obras recientemente realizadas, minimizando el impacto y optimizando los recursos. Asimismo, se apuesta por la simplificación de las instalaciones y su segregación según los distintos usos, mejorando la eficiencia y el mantenimiento a largo plazo. El carácter urbano del edificio se pone en valor mediante estrategias que refuerzan su visibilidad en la ciudad. Pequeños gestos arquitectónicos, como aperturas estratégicas y elementos ligeros, potencian la relación entre el interior y el entorno, generando un espacio accesible y abierto a la comunidad.
En síntesis, la propuesta integra patrimonio y contemporaneidad mediante una intervención clara, racional y sostenible, que revitaliza Tabacalera como un espacio dinámico, versátil y en diálogo con Madrid.
La distribución del programa funcional se lleva a cabo organizado por niveles de forma que se mantenga íntegra la estructura de muros de carga del edificio y considerando que la intervención en el patrimonio concluye el proceso de ampliaciones históricas de las que fue siendo objeto a lo largo de su historia. Para satisfacer las necesidades del proyecto se realizan 3 tipos de operaciones: nuevas construcciones, una rehabilitación basada en inserción de piezas de menor escala que las anteriores, y el tratamiento de los espacios exteriores.